Romero, la opción preferida por Simeone, se aleja y aparecen alternativas
El Atlético de Madrid continúa reforzando su plantilla con paso firme. Tras los fichajes de Álex Baena, Mateo Ruggeri y Thiago Almada, este miércoles se ha hecho oficial la incorporación de Johnny Cardoso, centrocampista norteamericano que llega procedente del Real Betis.
El de New Jersey se convierte en el primer mediocentro puro que ficha el Atlético desde la salida de Thomas Partey, y su llegada refuerza una zona del campo donde hasta ahora se habían alternado nombres como Koke, Barrios o Kondogbia, sin encontrar una solución definitiva.
La dirección deportiva del club, junto al cuerpo técnico liderado por Simeone, ha diseñado un mercado de fichajes ágil y enfocado a las necesidades reales del equipo. El propio Miguel Martín Talavera lo resumía esta semana en El Larguero: «El Atlético ha hecho las cosas rápidas y bien. Un póker de incorporaciones muy competentes».
Cardoso, que se unirá algo más tarde a la pretemporada, ha sido uno de los fichajes más esperados por el cuerpo técnico. No obstante, todo indica que no será el último. El club tiene claro que todavía necesita reforzar la defensa, especialmente el centro de la zaga.
Romero, el deseado por el Atlético, sigue sin acercarse
El nombre que más gusta en los despachos del Metropolitano es el de Cristian “Cuti” Romero, actual central del Tottenham y uno de los favoritos del cuerpo técnico. Desde hace meses, el argentino ha mantenido conversaciones con el club madrileño e incluso habría mostrado su interés por vestir la camiseta rojiblanca. Sin embargo, el alto coste de la operación ha enfriado las opciones.
Daniel Levy, presidente del conjunto inglés, no está dispuesto a negociar por menos de 60 o 70 millones de euros, una cifra fuera del alcance actual del Atlético. Además, el Tottenham pretende renovar a Romero y convertirlo en una de sus figuras centrales a largo plazo.
A pesar del interés mutuo, todo apunta a que la llegada del exjugador de Atalanta no se producirá este verano, salvo giro inesperado. Romero seguirá en Londres, mientras el Atlético estudia otras opciones más viables en el mercado.
El efecto extracomunitario condiciona al Atlético
La normativa sobre jugadores extracomunitarios complica todavía más algunas operaciones. Actualmente, el club tiene cubiertas las tres plazas disponibles con Thiago Almada, Nahuel Molina y Samuel Lino. Incluso con jugadores como Gallagher (afectado por el Brexit), el margen es mínimo.
Por eso, el club ha comenzado a moverse en otra dirección. Uno de los nombres que ha cobrado fuerza en las últimas horas es el de Jesús Areso, lateral derecho de Osasuna. Aunque el Athletic Club ya lo tenía prácticamente cerrado, el Atlético ha entrado con fuerza en la operación. La idea es que Areso pueda competir con Marcos Llorente, mientras se estudia una posible salida de Nahuel Molina el próximo curso.
Esta situación ha congelado la operación con el club bilbaíno, y todo apunta a que el Atlético es ahora el mejor posicionado para cerrar al defensa navarro.
Con estos movimientos, el conjunto colchonero demuestra una vez más que su planificación está más viva que nunca. Cardoso ya es rojiblanco, y aunque Romero se aleja, el Atlético no descarta seguir reforzándose con nombres de peso.
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